25 de abril de 2010

De madrugada


Suelo acostarme todas las noches con el teléfono móvil encendido sobre la mesita de noche, pues mis padres al residir fuera de la ciudad, tienen sus achaques de salud y, Dios no quiera, pero por si acaso tenga que salir corriendo hacia donde ellos se encuentren.

Hace dos semanas, estando dormida, me llamaron al teléfono sobre las tres de la mañana. Me dio un salto el corazón, porque lo primero que pienso es en mis padres, miro la pantalla y pone “Desconocido”, y pensaba que se trataría de una broma. Al descolgar, me cuelga quien hubiere sido. Desde entonces, no paraba de dar vueltas en la cama, y no tuve más remedio que levantarme porque no conciliaba el sueño.

Y anoche volvió a repetirse, pero esta vez era en el timbre de abajo. No paraba de llamar en reiteradas ocasiones, mire el reloj y era las seis menos cuarto. Pensaba que como es feria, seguramente se trataría de alguien ebrio. Me levanté de mal humor de la cama y respondí al telefonillo:
-¿Quién es?
-¿Está Carlos?- respondió una voz masculina.
-No. Aquí no vive nadie que se llame así.
-¿Pero es el piso tal?
-Sí, pero vuelvo a repetirle que aquí no hay nadie que se llame Carlos.
-¿Puede abrirme?
-No. Porque no son horas y porque me acaba de despertar.
No respondió y colgué el telefonillo. Tampoco noté en su voz los efectos del alcohol.
Regresé a la cama y no podía dormir. Me levanté nuevamente para ir a la cocina, y prepararme una infusión tranquilizante que compré no hace mucho en la farmacia. Volví a la cama, la gente cantaban sevillanas por la calle, comenzaba a amanecer... hasta que me levanté por tercera vez.

Estoy por aquí haciendo cosas, pues siempre tengo algo que hacer y esperaré a esta noche, a ver si me duermo enseguida.

13 comentarios:

Esteban dijo...

Espero que esta noche ya te dejen de dormir!!! Un beso y buena semana.

Alicia Lara Clares dijo...

Puf, eso es lo que se dice un mal despertar...
Esta noche recuperas todo lo que no has dormido antes :P
¡Un beso!

Lourdes dijo...

Joé con la gente, no? Yo tengo por norma no contestar al teléfono si pone "Número privado" o "Desconocido", pero ya el sólo hecho de llamar a esa hora es para contestar y poner verde al que sea.

Anda, a ver si ya te dejan tranquilica, hombre por favor, que ya está bien con la tontería.
:)

Un beso, guapa!!

Ligia dijo...

Espero que no te den más la lata. Hay mucha gente incordio. Abrazos

Rosa Cáceres dijo...

No te preocupes, pero no le abras a nadie a esas horas.
Yo soy bastante miedosa, pero si me toca encierro bien y ya está.
Lo del teléfono sería una equivocación.
Te voy a contar una anécdota de risa.Una noche en la playa, en verano, habíamos vuelto de pasar el día en Granada y estábamos lógicamente muy cansados. A media noche se oían unos golpes en la puerta de entrada que desde luego parecía que alguien estaba intentando forzarla para entrar. Desperté a Javier y bajamos los dos dispuestos a enfrentarnos con quien fuera (yo llevaba más miedo que siete viejas jajaja) pero siempre me crezco y disimulos. Abrimos la puerta puesto que no se veía a nadie ni por la mirilla ni por la ventana del porche, y....un gato loco se nos coló en la casa y enfiló escaleras arriba, a los dormitorios ¡jajaja! Toda la noche persiguiéndolo y el gran hijo de mala gata toreándonos como quiso jajaja

mariajesusparadela dijo...

Lo siento por ti.

Cabopá dijo...

Los timbrazos y los ring,ring..a media noche son alarmantes aunque se esté despierta....
Me alegro que no fueran malas noticias...
Besicos sevillana...

Unknown dijo...

Yo no soporto que me despierten de un sobresalto con una llamada o el timbre de la puerta. Después, es imposible coger el sueño y me pongo intranquila.
O cuando se confunden y llaman al telefonillo y no piden ni disculpas, nunca les abro la puerta del coraje que me da!.
Besitos.

aaaa dijo...

En estos últimos 15 días, tuve una experiencia similar a la tuya, estuvo en mi casa una amiga pasando unas vacaciones (dejaba su móvil personal encendido) una noche llamó su ex para despertarla a las 5 de la mañana; otra noche, una persona que le quería cobrar unos productos a las 2 de la madrugada... ahhh llamaban desde el otro lado del Atlántico. De todas formas ya no pudimos dormir...

Yopopolin dijo...

que gente de verdad! que poco civica es la huminadad con las personas que duermen...

concilia el sueño!
bsos

Manel Aljama dijo...

Comprendo cómo te sientes. Una cosa es que uno viva la noche y otra muy distinta es que tengas que dormir y no te dejen. Me identifico plenamente contigo pues en mi caso, el sueño (la falta de sueño) es mi talón de aquiles.
Las llamadas no identificadas no las suelo coger. Cuando te tienes que quejar debes identificarte y para ofrecerte cualquier cosa llevan antifaz. Pues no.

A pesar de que cuentas vivencias personales lo haces de manera que parezca muy real pero que no te haya pasado. Eso es un buen elemento para hacer historias de ficción. ¡Ánimate!

LA CALLE VACÍA dijo...

Lo primero gracias por pasar por mi blog, en cuanto a las llamadas ocultas tengo que decir que estoy hasta el gorro de ellas. Desde hace tiempo decidí descolgar las llamadas de ese tipo y dejar el teléfono descolgado un rato, al menos que les cueste dinero el tocar las narices ya que si no descuelgas la factura no les sube.
Bueno espero que estos días no te hayan molestado y hayas podido dormir.

Anhermart dijo...

Tómatelo como dos casualidades que no tienen porqué repetirse. Lo importante en estos casos es no darles el más mínimo crédito a estas coincidencias ya que son solo eso. De todas formas, si se repitieran, puedes hacer una cosa que suele dar resultado; si te llaman a altas horas y descuelgas el teléfono, no digas nada, espera a que hablen, aunque sea un familiar, si es alguien conocido insistirá, dirá algo y reconocerás su voz. Si es algún imbécil bromista se desconcertará al no escuchar tu voz y creerá incluso que lo estás grabando o localizando de alguna manera. Esa gente disfruta con que te pongas nerviosa y le pidas por favor que no te moleste. Calla y ponlo nervioso hasta que se inquiete y cuelgue.
Se de alguien que lo hizo así y terminaron las llamadas nocturnas que lo tenían agobiadísimo.
Saludos.