28 de noviembre de 2009

Mentiras


Cuando nos despedimos aquel domingo, con planes para mediados de la semana siguiente, nada haría presagiar en mí lo que ocurriría. Desconozco si ya tendrías pensado o no lo que vendría de ahora en adelante.

Si hay previstas cosas en común por realizar y desapareces, ¿por qué no atendiste mis llamadas, mensajes y correos electrónicos? No cuesta nada decir “no puedo por x motivo”. ¿Por qué actúas así? ¿Acaso te cuesta tanto ponerte en mi lugar?

Dices que soy una mujer con un corazón muy grande, pero ese corazón pecó de actuar bajo tus sentimientos y asuntos con más prioridad que los propios. Y encima te atreviste a añadir que no merezco nada malo, incluido el dolor.

Reiteras una y otra vez ser un hombre de palabra, imagino que muy relacionado con aquello de lo que ves es lo que hay. Pero en estos instantes lo pongo en duda. ¿Será porque al ser un hombre de palabra se te han escapado cualidades tan valorables como la valentía, fortaleza, constancia, sencillez, humildad, honradez, etc.?
Cuando verdaderamente creas ser un hombre de palabra, respóndeme, porque quiero saber las razones que te han llevado a esto.

Has mentido, como los cobardes y encima marchas por la puerta equivocada.



Elige una mujer de la cual puedas decir: yo hubiera podido encontrarla más bella, pero no mejor. Pitágoras.


12 comentarios:

mariajesusparadela dijo...

Algunos tiene un pico de oro. Pero nunca es tarde para rectificar. Ahora, que ya sabes lo que vale su palabra ¿te merece la pena preocuparte? " a enemigo que huye, puente de plata" ponle las cosas fáciles para que se vaya: no te merece.

Lourdes dijo...

Jo, hace un año estaba yo igual, Tejedora.
Dolida, hecha polvo... Sólo por haberme creído unas palabras que después descubrí que no valían nada. Promesas y promesas que no se cumplieron en su día, pero que ya no me importan.
El tiempo pone a cada uno en su lugar. Eso siempre... Que no se te olvide, niña!


Un beso enorme, y un achuchoncillo de ánimo tb.

Ligia dijo...

No hay nada peor que las mentiras en una relación. Así que como dice el dicho "mejor solo que mal acompañado". Abrazos

José Luis López Recio dijo...

Si algo es importante en una relación es la sinceridad y el diálogo. Así ninguno de los integrantes de la pareja se podrá sentir defraudado ni engañado.
Me quedo con la frase.
Un abrazo.

Cabopá dijo...

Las mentiras entran siempre por la puerta equivocada y quienes las perciben no se dan cuenta nunca...
Bonito relato tejedora siempre tejiendo cosicas que nos gustan...
Besicos.

VIVIR dijo...

Preciosa mia... posiblemente o seguramente ese señor no te merecia... no era el precisamente el embajador encargado por Dios para darte lo que el no sabe darte ni decirte...

Al igual en vez de mirarlo desde un lado negativo deberias de mirarlo desde un lado positivo...

Porque me da la impresión que no estais hecho el uno para el otro...

También puede ocurrir que se haya fijado en tu guapura de afuera y no en la de adentro...

Saca ese capote y dale una "media veronica" a la vida...

No te comas la cabeza... que por lo que cuentas no merecia la pena continuar con un amor que camina en el aire...

Un beso enormeeeeeeeeeeeeeee

Ana dijo...

Uff...Como me veo en tus palabras...Y te digo como Lou, el tiempo pone a cada uno en su lugar.

Muchos besitos preciosa.

Lina dijo...

Algunos hombres son embusteros y despiadados por naturaleza. La pena de todo esto es que una se da cuenta de ello cuando se van, no cuando llegan.

Un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

¿Es creación literaria o es confidencia?
Si es lo primero, bordas el tema, tan conocido como sentido por la mayoría de las mujeres.
Si es lo segundo, me acuerdo de la canción de Mina, antigua pero que me sigue encantando, "parole, parole". Los caramelos, de palabras de miel, son sólo caramelos, se acaban apenas los paladeamos.

manu dijo...

Suele pasar que la gente diga que es una persona de palabra, sucede (estimo) que esa creencia es teórica, con lo cual, al inmiscuirnos en la práctica, la teoría pierde color al darse cuenta que los basamentos no son tan claros…subsiguientemente se presupone que la otra persona siente más afecto que uno…con lo cual no se sabe cómo manejar dicha situación y por consiguiente = desaparece.

Saludos

tejedora dijo...

María Jesús: A día de hoy lo estoy menos, aunque los pasados han sido peores y es que se me han venido muchas cosas encima. Le he dejado las puertas abiertas para saber por qué lo hizo, aunque si no lo hace, no me queda más remedio que salir adelante antes que quedarme estancada.
Un abrazo.

Lourdes: Recuerdo lo que te ocurrió hace un año. Me dejaste apenada y recuerdo lo que te respondí. No entiendo cómo puede seguir adelante con su vida, ocurriendo esto, pero como hay de todo…
Un beso, guapísima y gracias por tus achuchones.

Ligia: Mucho mejor que esté ahora sola. ¿Qué hubiese ocurrido más adelante? Iría la cosa peor que ahora.
Un abrazo.

Cabopá: Cuánto me hubiese gustado recibir un “aviso” desde el principio, con el motivo de haberme dado cuenta antes de lo que me estaba haciendo él.
Muchos besos.

José: Dos cualidades muy importantes que citas: sinceridad y diálogo. Y yo que me tomo en serio las relaciones, aunque siempre con un toque de humor que tampoco viene mal… más que nada para que la rutina no haga de las suyas.
La frase va incluida en el escrito (le viene que ni pintada, como solemos decir en el sur). Todo lo que has leído –y los demás también- es un correo que le escribí y quise compartirlo con vosotros.
Un abrazo.

Linita: Bienvenida a tu casa. Es cierto lo que escribes. Inclusive viene bien para tener una coraza que nos proteja ante lo que se nos pueda venir encima.
Un saludo.

Ana: Eso espero.
Muchos besos, linda.

Tito Juan: Al principio pensaba que sí estábamos hecho el uno para el otro, pero dada la situación que se produjo después…
Decía gustarle más mi interior que el exterior. Te ha quedado muy bien lo de la “media verónica”.
Un beso.

Rosa: Confidencia. He querido compartirlo con vosotros.
Me dio poco tiempo a saborear esa miel que citas.
Besos.

Manu: Bienvenido seas. Tal y como escribí era él el que decía ser una persona de palabra. Lo repetía en numerosas ocasiones. La comprobación no se ha dado.
Un saludo.

Meiguiña dijo...

Si hay algo que odie en una relación, que consiga sacarme de mis casillas, es la mentira.

Yo no quiero mentiras, ni falsas promesas aunque la verdad me pueda hacer llorar o hacer sangrar a mi corazón, la prefiero.

Quizás yo no sea la más adecuada para dar consejos sobre este tema porque ...

Vive tu vida como desees pero intenta sufrir lo menos posible.

Biquiños meigos